Cuando Coca Cola salió por primera vez al mercado su
función publicitada fue la de eliminar el dolor de cabeza, por eso que
su venta se realizaba en farmacias. Hoy, después de 125 años de
existencia, Coca Cola se encarga de vender un sentimiento, más que
aliviar dolores, aunque la crítica general no se encuentra de acuerdo a
sus contenidos.
Quien se habría imaginado que John Smith Pemberton
habría sido el impulsador de una de las compañías más ricas del mundo
cuando en 1886 presentó en su farmacia una sustancia que aliviaba el
dolor de cabeza y la depresión. Esta oscura bebida gaseosa alcanzó el
año pasado los 12 mil millones de dólares en ventas alrededor del mundo,
cifra que comprueba su éxito rotundo.
Con más de 500 productos diferentes en el mercado, esta compañía
americana está presente en más de 206 países, donde el logo es
reconocido por todos sus habitantes. Después de las varias
transformaciones de presentación de su botella de vidrio, plástico y
lata, su reconocimiento de marca es uno de los más ejemplares para el
mundo publicitario.
Aunque sí poseen mucho apoyo por parte de su clientela, Coca Cola
se encuentra actualmente con un gran desafío, sobre todo en su país de
creación. Esto se debe a que en USA la mayoría de sus habitantes posee
sobrepeso. Varios críticos consideran que deberían tomarse mejores
medidas acerca de este tipo de bebidas que incluyan un excesivo valor de
azúcar. A estas opiniones responde Gary Fayard, director financiero de
Coca Cola, diciendo que : “Nada en esta botella (señalando una botella
de Coca Cola) es malo. Está hecha casi completamente de sustancias
naturales. No aconsejaría tomarla 20 veces al día, pero tomarla en
cantidades normales no causa ningún problema”. Al parecer, la estrategia
del “sentimiento de felicidad” no bastará para hacer sonreír al público
estadounidense. Las estrategias publicitarias y comunicativas de la
compañía deberán incluir el apoyo a la eliminación de la obesidad dentro
de su país natal.
En la practica hemos realizado el siguiente CUADRO NPI
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